Es la frase más repetida una vez dentro del gran edifico. Has estado tres meses esperando a empezar y ahora no sabes qué decir. Todos están igual cruzado de brazos, como a la espera de que alguien haga algo. Será entonces cuando llegue alguien y rompa el hielo de esta manera se van formando los primeros grupos de primero de carrera. Estos grupos son normalmente muy numerosos. En el que llega sabe que todo el mundo está como él que no conoce anadie salva meras coincidencias.
La gran diferencia con el colegio está en aspectos superficiales del tipo tamaño y cantidad. Se llegó a contar 120 alumnos en una misma clase, unos más mayores y otros apenas unos críos. Pero lo que les une es que ahora están en la misma clase con los mismos profesores, y quizá estén juntos durante algunos años, pero eso ellos no lo saben.
Estos sucesos resultan una ventaja para el cuerpo docente ya que no tendrán problemas con aquellos a los que le guste "darle al pico". Resulta muy inteligente por parte de los profesores meterles el miedo en el cuerpo. Por alguna razón les gusta decir que su asignatura la suelen aprobar muy pocas personas, hecho que es creible una vez vistas las estadísticas y comprobado la biografía personal alguno de ellos.
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